Cardinale es una marca de calzado icónica en Chile, surge al instalarse en 1964 la primera tienda en Santiago centro. Con un crecimiento sostenido, desde los 90 hasta hoy se ha consolidado como una empresa familiar, posee un total de 17 tiendas, además de distribuidores y presencia en multitiendas a lo largo del país.
Desarrollamos un guideline de arquitectura acorde a la nueva imagen de la marca, sustentado en la simpleza y transparencia de su diseño. Los materiales, formas y colores generan un espacio que invita al usuario a acceder e interactuar con los productos; el mobiliario, colores y gráfica, responden a un concepto clásico/moderno; busca ser ligero, sencillo y dinámico a la vez.
La gran vitrina de la fachada invita a acceder a una planta abierta donde resaltan los productos y el estilo Cardinale. El sistema y soportes de exhibición son flexibles, se adaptan a los cambios y renovación de productos. El layout de la tienda describe cada uno de sus elementos, desprendiendo de la ubicación de estos los puntos focales, las relaciones visuales y funcionales al interior del local. El espacio está definido por un elemento central, este mueble de exposición coordina la circulación y gravitación de la tienda en torno a él, las paredes laterales y de fondo están destinadas a exhibición, esta última también cumple la función de ventas.
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